Director General
Estoy aquí para ayudarte a definir la estrategia de tu empresa, identificar los objetivos y definir un plan para cumplirlos.
Para deliberar, hay que conocer, argumentaba el economista Luigi Einaudi. Actualmente, cualquier decisión empresarial ha de basarse en el uso eficaz de la información, desde una perspectiva predictiva. Cuantos más datos se tengan, más realistas serán las predicciones.
Sea cual sea la pregunta –comprar una nueva línea de producción, realizar una inversión, contratar empleados-, la inteligencia artificial predictiva puede dar una respuesta examinando las variables económicas y financieras de la empresa (ingresos, costes, productividad) y interceptando variables externas mediante algortimos.
Por ejemplo: ¿Qué ocurre si abro una nueva línea de producción en mi mercado? ¿Qué pasará con mi empresa, desde el punto de vista de la cuenta de pérdidas y ganancias o del balance? ¿Qué ocurrirá con el Ebitda de la empresa en un periodo determinado?
Aunque no está asegurada al cien por cien, la precisión que puede alcanzar la inteligencia artificial en la definición de estos escenarios es muy alta. Para ello, los algoritmos utilizan las tendencias macroeconómicas del mercado, como la disponibilidad de materias primas, los índices bursátiles y hasta las preferencias en las redes sociales.
Esta es la tarea de los agentes virtuales de Vedrai, una empresa cuya misión es dotar de soluciones de inteligencia artificial asequibles y fáciles de usar a empresas de todos los tamaños, desarrollando soluciones para apoyar el proceso de toma de decisiones de empresarios y directivos. Los agentes virtuales están especializados en hacer un seguimiento exhaustivo de la empresa, asignar el presupuesto de forma idónea y optimizar las inversiones; analizar millones de datos internos y variables externas, transformándolas en indicadores fácilmente legibles y utilizables.
Sin embargo, al hablar de agentes virtuales no hay que pensar en sistemas que sustituyan al ser humano a la hora de tomar decisiones, sino en una especie de navegadores que señalan el camino. Para las decisiones que afectan a la cuenta de resultados de la empresa, Vedrai pone a disposición de empresarios y directivos el agente virtual James.
El empresario plantea preguntas al agente virtual, como por ejemplo: ¿Alcanzará mi empresa el umbral de rentabilidad? ¿Cuándo? James, a su vez, da las respuestas de forma sencilla y rápida.
Por lo tanto, el principio cardinal de los agentes virtuales como James es anticiparse a las decisiones. El agente virtual proporciona las herramientas, analizando grandes cantidades de datos y el empresario o manager dirigirá a la empresa en sus decisiones con ayuda de las predicciones
Así, si la decisión se refiere a la compra de una nueva línea de producción, introduciendo los indicadores clave correspondientes podrá recibir un pronóstico de los resultados que podría obtener al realizar la inversión.
Los KPI son indicadores cuantificables de la eficacia (grado de consecución del objetivo) y/o eficiencia (rentabilidad en la consecución del objetivo) de un proceso o subproceso: «un KPI debe ser: cuantificable, detectable y correlacionado con el objetivo de negocio interno del proceso. Para medir un proceso mediante KPIs, hay que crear su mapa, es decir, identificar sus resultados exactos, sus objetivos y sus actividades principales», como escribe el profesor Matteo Golfarelli, Alma Mater Studiorum – Universidad de Bolonia.
Según Federico Della Bella, consultor de P4I, hay que tener muy en cuenta la valoración de la inversión: con el método de los flujos de caja descontados y el valor actual neto (VAN o VAN Valor Actual Neto), se puede estimar el valor actual de los flujos de caja futuros, de forma que se puedan evaluar las mejores opciones de una cartera de inversión.
También cabe recordar que la rentabilidad de un proyecto puede evaluarse con el EBIT o EBITDA, el flujo de caja, el cash burn rate, para evaluar la necesidad real de liquidez.
Otros posibles indicadores del balance son el rendimiento del capital: ROE y ROTA, ROS, para la rentabilidad de los fondos propios, de todos los activos y de las ventas respectivamente. Por último, el coeficiente de rotación de activos, es decir, en qué medida se utilizan realmente los activos de la empresa.
En última instancia, considerando la combinación de factores de entrada y resultados de salida, con la IA del agente virtual se pueden predecir de manera eficaz los efectos de una decisión empresarial, como la compra de una nueva línea de producción.